La Comisión Europea ha informado este jueves de que da por buenas las concesiones ofrecidas por Apple para abrir a sus rivales la tecnología inalámbrica NFC a la que limita las posibilidades del pago sin contacto ‘Tap to Pay’ de sus teléfonos iPhone –lo que en la práctica restringía la competencia a favor de su servicio ‘Apple Pay’–, unos compromisos vinculantes que el gigante tecnológico deberá cumplir durante diez años para evitar una multa millonaria por abuso de posición dominante.