El Gobierno ha apuntado que los problemas de atención presencial de la Seguridad Social tras la situación «incidental y compleja» provocada por la pandemia «han sido atajados», tras haber atendido a cerca de seis millones de ciudadanos en 2022 y reforzar el número de efectivos interinos en 747 personas, que previsiblemente empezarán a trabajar en el primer semestre de 2023.